Hoy no es un día más para Carlos Alberto Legnani, que está festejando sus primeros 82 jóvenes años de vida. Caíto nació un 7 de abril de 1939 en Winifreda, provincia de La Pampa.
Desde muy chico en su Ciudad Luz (como él la denomina) abrazó dos pasiones: el automovilismo y las transmisiones deportivas. Aquellas que escuchaba pegado a la radio de su padre en pleno apogeo Luis Elías Sojit, el gran referente de los relatores de automovilismo, y también de otras disciplinas.
Ese niño fue creciendo, y con una valija llena de sueños, llegó a Buenos Aires. En la Capital Federal dio sus primeros pasos en el periodismo deportivo a lado del relator Eugenio Ortega Moreno. Hasta que un día, comenzó a cumplir su anhelo de tener una organización deportiva propia. Aquello se concretó el 15 de octubre de 1963 cuando salió al aire por primera vez, en el viejo Canal 7, Campeones del Camino. Las primeras imágenes mostraron programas previos y un compendio del Gran Premio de esa temporada que tuvo la presencia de destacados pilotos extranjeros como el alemán Eugen Boringberg, vencedor de la competencia a bordo de un Mercedes Benz.
Luego vino el turno de la radio. Ahí el derrotero suyo, y de su equipo, comenzó con transmisiones de boxeo y automovilismo. En el viril deporte de los puños se desempeñó como relator en la época de oro del mítico Luna Park, y hasta llegó a narrar una pelea mundialista. Eso ocurrió el 12 de agosto de 1967, cuando en el escenario ubicado en la esquina de Corrientes y Bouchard, Horacio Acavallo defendió exitosamente la corona del peso mosca (versión Asociación Mundial de Boxeo) ante el japonés Hiroyuki Ebihara.
En un momento, el boxeo quedó de lado y se dedicó única y exclusivamente a su pasión, el automovilismo. Pasión que nunca más lo dejo escaparse.
Su impronta, lo llevó a concretar las descomunales transmisiones de Turismo Carretera en la época romántica de la ruta y los grandes premios, con el soporte de un equipo periodístico notable y el apoyo incondicional de su familia.
Otro hito en su carrera fue el de haber acompañado a Carlos Alberto Reutemann por todo el mundo, entre 1971 y 1982, durante el periplo del santafesino por la Fórmula 2 Internacional y la Fórmula 1.
Aunque previamente ya había incursionado con sus transmisiones desde el exterior, cuando en 1968 relató el Gran Premio Coronación de la temporada disputado en México, que coronó por segunda vez como campeón del mundo al británico Graham Hill.
Pero no sólo de la historia vive Caíto, ya que sigue más vigente que nunca conduciendo el ciclo televisivo Historias de Campeones, donde evoca las principales competencias y a los grandes pilotos argentinos de todos los tiempos con imágenes de época. Además, desde el 2009, es la voz del Dakar con sus relatos por Radio Continental, con altísimos picos de audiencia a lo largo de más de 20 días de competencia.
Producto de su destacada trayectoria ha recibió importantes distinciones como el Premio Domingo Faustino Sarmiento que otorga el Senado de la Nación (2009), Santa Clara de Asís, Premio Juan Manuel Fangio, por los 50 años del equipo Campeones y sus 54 ejerciendo el periodismo, y el Premio Antonio Devoto (barrio donde vive desde hace medio siglo).
Por todos estos logros, por su capacidad de trabajo, honestidad, tenacidad y compromiso con el micrófono, y la audiencia, todos los integrantes de este prestigioso equipo que gestó hace más de 50 años, le deseamos un muy feliz cumpleaños.
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